lunes, 13 de diciembre de 2010

TRADIZIÓN NADALENCA/TRADICIÓN NAVIDEÑA: A TRONCA E A TOZA


Aragón es una tierra que se caracteriza mayoritariamente por rendir culto al árbol (dendrolatría), en ello coincide con otras partes de Europa. Esta particularidad es más bien dada en zonas boscosas, donde hay una gran veneración por los árboles y los espíritus que los habitan. Casi todas las culturas cuentan con un bosque sagrado. Y es que siempre se ha creído que los árboles tienen un alma o espíritu como el de los hombres , por ejemplo, su sombra. Por ello, ha perdurado en el tiempo esa idea de que abuelos y padres se convertían tras su muerte en árboles mágicos que se convertían sagrados, debiendo por ello, evitar su corte o quema.


El hombre ha sentido la necesidad de encender fuegos cuando la luz comienza a disminuir, y esto ocurre justo en dos momentos importantes del año, uno para el solsticio de verano (san Chuan/Juan) y otro para el de invierno, Pascua de Nadal, necesitando para ambos madera. Fue el arqueólogo británico John Brand quien se dio cuenta de esta dos formas de hacer fuegos, una sería colectiva en el exterior, la de san Chuan/san Juan, y otra familiar, privada, que ardería en el fogaril/hogar, para Pascua. Ésta última también esta extendida por Gran Bretaña, Alemania, Francia, Suiza, Italia, Serbia, Albania, ciertas zonas de los Cárpatos o núcleos eslavos y en distintas comunidades españolas del norte como (Galicia, Euskal Herria, Navarra, Cataluña, Aragón) o localidades levantinas e incluso de la isla de Mallorca.


Relacionando el tema con la Navidad, añadir, que ésta es una fiesta que suele celebrarse en familia y en casa, junto al fuego y disfrutando de las comidas típicas de estas fechas. La familia, la casa, el fuego y las comidas rituales son los elementos que constituyen los pilares básicos de estas celebraciones.


Muchas son las costumbres foráneas que hemos adoptado en las últimas décadas, como el árbol de Navidad, las doce uvas o Papa Noel, pero en nuestra cultura aragonesa todavía conservamos costumbres y tradiciones ancestrales, transmitidas de generación en generación. Tal es el caso de la bendición de la Toza, la Tronca ó el Caga Tió.


Muchas son las maneras de celebrar este antiguo ritual y prueba de la importancia que tiene en los lugares donde todavía pervive esta costumbre es la diversidad de nombres que puede recibir: tronca, tizón, tió, troncada, toza, tronc, choca, zoca, pullizo, rabasa, corniza, cabirón...y muchos más.

La madera del leño ha de ser fuerte (olibera, almendrera, noguera, carrasca, encina, urmo/olmo o caxico/roble) y se recoge durante la primavera, cuando se va al bosque a preparar la leña para el invierno siguiente. Se reserva entonces la toza más grande para el día de Navidad, y antiguamente era el varón de la casa el encargado de cortar el árbol que serviría de leño navideño. Al cortarlo se le decía:


Tu yes l’eslexito ta fer a tronca. Desincusa-nos
Tú eres el elegido para hacer la tronca. Perdónanos

En Aragón según la zona se llamaba de una manera e incluso el rito era diferente:


En la parte occidental, se denomina Toza.


Una vez cortado el árbol, se llevaba hasta la casa donde debía instalarse en el fogaril (hogar-fuego), para bendecirlo y pegarle fuego. El resto del tronco que quedaba, se iba quemando, después poco a poco o se colocaba en la falsa (buhardilla) para evitar que cayeran rayos en la casa, o bien se guardaba para la próxima Navidad donde se colocaba con la toza nueva para que la vieja le pasase su fuego.


Debe quemarse como mínimo de Nochebuena a Reyes, aunque variaba según los lugares. Hay un dicho que dice:
Tizón verdadero, de Navidad a Año Nuevo.


Pero más importante que el tiempo que la toza quemaba en el hogar, lo era el recoger la ceniza “bendita” que se consideraba que tenía propiedades y se utilizaba como abono en Benasque, para extender por los campos en el Serrablo, o para blanquear la ropa o prevenir el piojillo en gallinas y conejos.

Los niños pasan a ser una parte importante del rito ya que son los encargados, el caganiedo o más pequeño de la casa junto al más anciano, se le sentaba a escarramanchas (a horcajadas) sobre la toza y él se encargaba de decir las frases sagradas y de hacer en el tronco la señal de la cruz con un porrón de vino y morder la torta con la que se bendecía. Aunque el procedimiento se repetía en todas las localidades, la oración podía variar siendo la más extendida:


Güen tizón, güen barón
Güena casa, güena brasa
Que Dios mantenga a paz en ista casa
Y en toz os que i son


Y seguidamente se cogía un porrón de vino, se hacía la señal de la cruz sobre el tronco y se decía:


Tronca de Nabidá
Yo te bendizco
En o nome d’o Pai,
D’o fillo y d’o Espritu Santo. Amén


Y bebía un trago de vino. Después se rezaba por los muertosde la casa, los abuelos y por los padres que dejaron el patrimonio (Adahuesca, Buerba y Guaso).

Otras oraciones son las siguientes:


Buen tizón, buen varón,

Buena casa, buena brasa,

Dios mantenga al amo y a la dueña de esta casa
Tu eres negro, yo soy blanco y

en la tripa te me zampo

(Escartin de Sobrepuerto)

Bebe tizón, Bebe porrón,

Tu por la boca .Yo por el garganchón.

Buen tizón, Buena casa, Buena brasa.

Que Dios conserve A los amos de esta casa.

(Cortillas)


En la parte Oriental, se denomina Tronca:


Aquí la Tronca a parte de su sentido ritual tiene un valor lúdico y donde los niños adquieren un protagonismo esencial. Además de bendecirla se aprovecha algún hueco o agujero del tronco elegido y se rellena con lamines, galletas, nueces, piñones, mandarinas, peladillas, pasas, …hasta juguetes que crean un ambiente festivo y alegría entre los más pequeños. El turrón y el cava también estan presentescon los se finaliza la noche de Nueibuena.


Una vez elegido la base del árbol, dando preferencia a los que contengan bastantes agujeros –allí se introducen los regalos-, el padre manda a los niños a una habitación aparte para que mojen en agua las tenazas del fuego y no vean los agujeros donde van a ser rellenados con los distintos lamines o pequeños obsequios. Una vez realizado esto, se les llama y se les dice que ya pueden hacer cagar la tronca dando ellos tres fuertes golpes, acompañadas de unas coplillas, que más o menos conservan la misma longitud:


Tizón, caga turrón

Tronca, tronca de Nadal
Caga turrons y picha bin blanco.

Tío de Nadal
Caga turrons
Que si no cagas
Te pego un tozolón

Tronc de Nadal
Dona casquetes
I dona vi blanc
(Ráfales)

Tronca de Nadal caga turrons i pisa ví blanc.

No cagues arengades que son massa salades.


En algunas zonas y pueblos del Pirineo, combinan las dos modalidades rituales, bendiciendo y golpeando al Tizón:

Cabirón, cabirón ¡Caga turrón!


Nota: para terminar añadir que en tiempos de carestía se rellenaba con lo que había en casa, más tarde las troncas han pasado a cagar juguetes, lo cual indica que el ritual esta más vivo que nunca.


Asperamos que tos aiga feito goyo ista tradición y que de cuan en bez podaz practicar-la con os buestros fillos e parentalla.

GOYOSO NADAL E SOLZTIZIO D’IBIERNO